Quiero escribir del pasado, de hace unos años, cuando todavía era feliz.

Quiero que las flores sigan existiendo, y mueran los ordenadores.

Quiero seguir sintiéndome solo para poder escribir.

Quiero que el límite nos haga libres.

Quiero amarte sin condición.

Quiero ser un aprendiz de escritor, que mi nombre figure en los libros de texto de literatura de segundo de bachillerato, quiero que la gente me estudie, que sepan que hay algo grande en mí, en mi vida y en mi nombre…

La vida aparece tras de sí;

Escritor de algo breve si se puede llamar así a pasar el tiempo componiendo relatos inauditos es a lo que me dedico. Tengo muy claro que aquí no importa la cantidad, sino la calidad. A saber, porque otros escriban novelas no significa que sean mejores escritores. Literato es aquel que no deja pasar un segundo en el que piense que en el papel reflejarse puede, un dramaturgo es un alma en pena encerrada en su habitación porque piensa que no hay nadie a su altura. Es una persona que asegura haber sufrido bastante por culpa de los demás y sin poder vivir sigue.

Reflexiono y me doy cuenta que donde dije digo… ¿Por qué no iba yo a querer repetirme si está en mi ADN? Reconozco que el silencio me enloquece y me priva, reina una tranquilidad espontánea de desatención impresionante.

Sé que soy muy friki; ¿sabían que la mayoría de prosistas antaño no terminaba sus carreras en la universidad y hacían ciclos de poesía?

¿Y si toda mi vida es una ilusión aunque sepa que pensar pienso…? Si los demás están conchabados lo disimulan muy bien.

El «horror vacui» y la falta de ideas empiezan a acercarse, ¿creen que existe la inspiración?

El tema de la obsesión es algo demasiado complejo. A mi modo de ver, los blogs de internet son el futuro de la literatura. La gente no tiene tiempo de comprar libros porque hay miles de blogs, es una pena.

Cada vez me cuesta más seguir el ritmo de las tecnologías, el de la gente que las consume, cada día somos menos los que usamos lo justo el móvil. Lo de escribir en el papel también creo que se está perdiendo, yo intento de vez en cuando hacerlo, pero aparentemente escribir a ordenador es lo suyo. No somos conscientes de lo que eso conlleva: nuestros ojos sufren más por ver la pantalla del ordenador, nos esforzamos menos, vamos a lo cómodo, los grandes escritores no tenían ordenador, gastamos electricidad, recibimos radiaciones.

Hoy en día lo de ser paciente escasea mucho. En general, se busca lo inmediato, el instante, el momento de diversión, la falta de empatía, el alejamiento de los móviles, la hiperconectividad. Parece que si no hablas por WhatsApp estás desaparecido y pasan de ti.