¿Posible, probable, viable, permisible, aceptable?
¡Es tu amor!
Si así fuere, perder te pierdo.
Ámote mas deber no puedo;
“latae sententiae”
bien sea.
Mais preguntarte quise,
pero tu rechazo siento.
¡Oh! saber tu reacción
me gustaría con acierto.
Ríes de mí por ser un tío;
más con tu distancia sufro,
desato mi locura en deseo,
y yo ya no puedo...
Ya no te acuerdas de mis besos, cuéntame…
«… que qué estoy pensando, que conmigo mismo tengo pa’ empezar y que tú solo piensas en verme acabado, porque tú no te miras por dentro y te ves y dices, quién soy y por qué, y tú no intentas corregirte, pero yo sí, yo soy el deseo y siempre me veo caliente pero me bajo a frío cuando ya no me quieres, cuando ni siquiera te importa verme, si no fuera para ofenderme o hacer daño a mis seres, tú no vales y no lo sabes, pero qué se va a hacer, la ignorancia sigue viva en España y sobre todo en el Levante. Espabilar que la vida no os pertenece y ser “agraecidos” ¡¡¡¡cobardes!!!!»
Lamento decirlo pero mucho me temo que no tengo ninguna esperanza con mi amado Baco. A él no le intereso en absoluto. Quiero verlo, necesito admirar su preciosa cara, sus bonitos ojos, idealizarlo todo, su robusto cuerpo. Le deseo tanto que es un amor maldito; latamente no me voy a reprimir dejándolo en platónico, de eso nada, este amor existe y cada vez crece más. Jamás tendrá punto final.
A veces pienso que debería ser una chica –como le pasó a Tiresias–, para que podamos ser pareja. Cuando alguien te gusta demasiado haces cualquier cosa por él. ¿Tú creerías que si yo fuera una mujer se fijaría en mí? Tengo curiosidad, pero creo que lo nuestro es utópico. Necesito buscar soluciones. Antes de convertirme en fémina completamente por él, debería vomitar lo que siento y lo que estaría dispuesto a hacer para tenerle.
Siempre le quise, lo supe desde pequeño. Los secretos que desvela la infancia…
¡Cuántos momentos hemos pasado él y yo! Me son imposible de olvidar, pero creo que él los esconde en el fondo de su ser, que también es mi ser, y me tacha a mí como lo peor.
La respuesta está en tu interior, búscala y hállala. En faz, tener miedo en muchos casos no sirve; el amado sigue ahí. Baco te digo que te amo, Baco te quiero, Baco quiero estar contigo.
Quisiera poder desvelarte lo mucho que te quiero frente a frente, pero no me atrevo (yo debo dar el primer paso puesto que tú nunca lo darás). Sé que no me quieres. No importa no que sufra por ti, tú nunca me querrás. Me pregunto si serás virgen, espero que sí, porque yo me reservo para ti. Quiero que mi primera vez sea contigo, Baco me atraes demasiado –incluso tu nombre lo hace–, pero creo que yo a ti no mucho.
Si pudieras oírme, leer estas palabras, besarme los labios. No quiero perderte. Mientras estés vivo todavía tengo una posibilidad…
El amor es locura, yo estoy loco de amor, tú eres mi amor, mi locura. No quiero pensar que esta libido sea eso, solamente una fantasía.
Estoy muy triste porque te veo cada vez más crecidito y eso me asusta, y también veo que cada vez te alejas más.
Yo siempre buscaba refugio en la danza. Inclusive me siento peor porque veo que necesito consuelo (ballet). No puedo salir adelante si tú no estás. Pido demasiado porque dentro de tus planes no está ser sarasa, pero de verdad que te quiero, y ese reto lo podemos afrontar juntos, yo estaré siempre a tu lado, apoyándote en todo, juntos podemos porque lo que importa realmente es el amor, amar es natural y yo quiero estar contigo a todas horas. ¡Te deseo tanto!
¿Debería declararte mi amor? Te reirías de mí; no podría soportar eso, me muero por dentro. Baco te necesito, eres el único…
Sufro muchísimo; quiero que os llegue algo trágico en mis palabras, que sintáis lo que significa vedado y todo lo que eso conlleva. (Ídem).
Hoy le he visto en el insti y en persona y sinceramente me ha dado mucho pavor. He sentido como si no le importase lo más mínimo, inclusivo como si mi otra cara le dejara ahí, en plantón. Me arrepiento mucho, pero qué iba a hacer. Lo que pueda pasar es cosa del porvenir. En el momento, comento su peludo pecho, a parte de que Baco para su edad es súper desarrollado, porque tiene dieciocho y parece el machote de tu life.
Puedo ser muchas cosas pero me defino como bisexual. Creo que todos los seres humanos lo son, porque existen tendencias y cada uno en mayor o menor medida selecciona. Mi estilo es un 20% en las señoras. Aún con un varón no me siento realizado, ya que me faltaría ese porcentaje. Por ende defiendo el trío como la forma perfecta. La estabilidad reside en el amor que recibes al día y considero que un muchachito y una dama juntos te aportan esa estabilidad. Para con las zagalas, no pido mucho; su capacidad verbal basta. En cambio, con los señores pongo el ojo crítico. Los cazo. El coraje es mi parte preferida. Busco las formas en su cuerpo desnudo. Baco es mi osito de peluche. Siempre me ha gustado y sentía una atracción especial que bueno pues cuando tienes tres años no sabes muy bien como explicarlo. Casi veinte años de condena; esto se acaba con la verdad por delante.
El joven Baco acaba de hacer la P.A.U. No sé qué es lo que ha decidido estudiar, si la música o alguna ingeniería, ya tengo un pretexto para hablar con él. ¡Le quiero tanto! De tanto en tanto, pretendo llamar un poco su atención; sorprendentemente. Me he rapado la mitad de la cabesa, no soy de los que pasan desapercibidos. Mi pelo es rizado y claro a mí me gusta lucirlo, pues una unión explosiva. «Quien lo probó lo sabe» (como dijo Lope).
Me siento muy frustrado. Para expresar mi odio hacia la gente te tengo a ti, la persona que me lees, qué digo, solo me tengo a mí mismo. Eso se va a acabar: con esta farsa, este engaño, esta “family”, no vamos a perdonar, no vamos a olvidar, ¿me entiendes? Sí, pues con ese individuo que me maltrata, insulta, aterroriza y se desahoga conmigo, la violencia de ese ser que en él habita, del que yo todo debo, al cual se supone debo estar agradecido… ¡Basta!
Zanjar este error, matarlo; de momento no sé cómo. No obstante, juro mataré. No importan las circunstancias ni las consecuencias –in excelsis–.
Según Juno, con ello conseguiré librarme de todas mis heridas; solo los muertos entierran a los muertos, y eso haré yo alma máter… dentro de mí ya no hay nada vivo, queda la amargura. El único aliento de vida que me resta son las ansias de matarlo. ¿Debo planearlo todo o simplemente hacerlo? Lo mío roza la demencia.
Mi traición hubo empezado en cuanto el rencor se habría apoderado de mí. Yo intentaba evadirlo, ignorarlo, etc. Nada, no había forma, él seguía maltratándome psicológicamente y en algunas ocasiones Baco me golpeaba la testa. Lo tendría todo grabado, mas se apoderó de mi móvil, yo no pude evitarlo, ya que no tengo fuerza física suficiente como para arramblárselo a un tipejo con más envidia que yo, pues él buscaba venganza en mí, no entendía nuestro amor, y querido amigo, la envidia lo da todo. A pesar de que algunos piensen que nada da, es el pecado “unificante” del cual uno no puede escapar por su propia voluntad y yo tenía que intervenir dado que crecía descomunalmente en ese ente penumbroso, que era en lo que se había convertido mi amigo. He de reconocer que la sospecha fue mi mejor defensa, si no, no seguiría aquí y ya estaría al otro barrio.
El desasosiego era mi bastón, enorme problema. Fue estar medio muerto, que mi cuerpo reaccionara de un modo muy especial, y es que me sentía frío, frágil, desatendido, indefenso… ¡Sentía odio! A la vez le quería a borbotones; su sed se fundía con la mía. Yo estaba en un estado mental muy agudo –¿esquizofrenia?–: ya podía pasarme horas y horas sin hacer nada productivo esperando a que aquel psicópata se fuese y me dejase. En un descuido aproveché para encerrarme en el aseo a pensar con una buena ducha termal...
¡Todo parecía un incesto dentro de un aquelarre! Arrancó la puerta; aún recuerdo el aroma de vainilla como lluvia dorada en la bañera y el gusto a excrementos de aquel volcánico día en el que me convertí en su coprófago. Suelen venir recuerdos de correazos y gritos de padecimiento; recuerdo la lágrima diluida en sangre y esparcida por el agua, la respiración estrepitosa y mis bordes rotos. Era feliz, estaba con él. No quería verme muerto, por contra no tuvo más remedio casero que maltratarme. Inclusivamente me siento sucio, como si fuese que esta mente no es de este cuerpo, que no puede poseerla porque quiere soñar viviendo. Me acuerdo de las marcas en el cuello cuando salgo a la calle.
Siempre he odiado a las personas aunque a priori lo disimule por mi propio beneficio. En cambio, las maldigo por el critiqueo y el correveidile ese tal que se traen y que me ponía a cien por hora. A todo lo que viene, indicar que ya no soy virgen y que mucho machorro me ha rechazao por eso (no los guarros y desesperados). ¿Quién quiere algo usado? Otros tan solo quisieron besarme, pero quizás no me sintiese libre del todo para hacerlo. La homofobia no se puede cambiar por el momento. ¡Solo podrás pensar libremente en silencio? Yo quería un poco de “amor-condón” y nadie supo estar a la altura; todos me dieron esquinazo, yo me dejé de lado, ¿podía conmigo mismo? Negativas buscan compasión; intentan librarme en parte de lo que voy a hacer, sí, mas debo pensar en ello. ¿Tormenta de esperma!
Si la fuerza no puedo usarla, entonces emplearé la mente e idearé la crónica de su muerte.
Quiero matar, estoy seguro al máximo; fíjate que en ese punto estoy, en el que nada de lo que puedas marcarme cambiaría mis planes, ahora mismo no tengo límites y lo voy a poner en marcha.
Creo que necesito un arma. Estar en la cárcel me abriría nuevos caminos, y conocería a criminales como yo. No me tengo que preocupar por mi libertad, sin embargo la sociedad es la mayor reja.
La música era mi única alternativa, contrariamente la fui dejandi, vi de cerca lo corrupta y corrompida que está; renuncio a mi sueño por las circunstancias (una excusa muy bonita, pero muy fácil). No soy de los que la fuerza se les va por la boca, de hecho odio a “Antonio Alcántara”, sólo de poner su nombre me dan arcadas, y además en parte le envidio. Maldita tele que se cree que ayuda poniendo las idílicas series en que todo es genial, con problemas que todos pueden afrontar. ¡Hipócritas to’s! Tú posiblemente seas aunque negativamente te des cuenta (todo se mira desde tu perspectiva). Para ellos lo eres y no conviene con reprimirse; el carma te atrapa y cuando lo hace todo es negro.
Todos nos embolicamos. Para mí, es ver una cara y mentir; al papel no le miento, lo prometo. En parte me gusta, pero lo malo es que te las restriegan en cuanto pueden. No basta con ser normal, ya que te acabarán recriminando por plasta.
Utilizaré un arma blanca. Súbito existen inesperadejas probabilidades de que me mate a mí y él alegue defensa propia; que no quede en el intento: sub júdice. Otra opción es olvidarme y esperar a que él envejezca antes mío. Soy dos días mayor; me cuide mejor que él y en un achaque matarlo. Es una estrategia para una vida dura y difícil. ¡No quiero pensarlo!
A contracorrientes: tendones en escabeche por frenesí derivan amor prohibido, mi amado Baco; siempre te he querido, siempre lo hago, a todas horas pienso en ti… Aquiles y Patroclo. ¡Seamos amantes!
No me puedo poner la máscara de la ocurrencia, porque sé que es quimera por tu parte. Si no te lo he preguntado nunca es quizá porque ya te lo habrán dicho o tú solito te lo imaginaste; creo que ya no me quieres ni como amigo. Ni tan siquiera me saludas. De lo que fuimos a lo que somos (vita brevis). Yo tengo intrínsecamente un gran vacío carmesí, supongo que en cuyo coqueto pecho, en el que late cuentakilómetros. ¡Pídote auxilio, Apolo!
Robo perdón por lo que quise haberte hecho, por decir la verdad. Te lo perdono todo, el rechazo, que no solo se siente dentro sino que se muestra afuera.
Mi querido troyano que todavía sigue latente tal primer día. ¡Ay! Aquel primer puro lapsus incordiante, que sin pensar asomó, que de repente inundó todo mi ser al querer estar con él. Baco, ¿dónde estás? La energy de la llama arde por ti, por los dos, per noi, yo te quiero muxo. Debería aclarártelo, mas temiera sentimientos mega diferentes…
Quiero verte en todo momento, cogerte en todos los sentidos, quiero tu centro, tus garabatos, quiero darte mi amor, ser el pasivo, quiero sentirte y sentirnos en un solo cuerpo, quiero pasar mi vida entera junto a ti, abrazados durante días, sin comer ni beber, solo pensandico en el otro, porque realmente así es el amor: yo pienso en ti y tú piensas en mí. Yo ya ni duermo, me desvelo y escribo porque aquí me siento nuevo; haciendo esto recibo gaya libertad de mis palabras. Me corrompo y todo son cristales al viento (me invade el sopor).
Baco, sé donde encontrarte, sé que no puedo perder un intento, y si lo hago volveré a hacerlo hasta que mi pasión decrezca. Mi vida no existe si tú no estás en mi rinconsito, si siempre que quiera verte deba evadirte para no interceptarte… Tú me idolatras y yo estoy a puntico de estallar. En compendio, débil siento contrarios: al exterior alicaído me jopo congelado mas deseoso al interior. Tú eres la razón, la razón para mí de todo, de lo simple y de lo complejo, de mis anticuados prisioneros sentimientos. ¡¡Tengo tantas, tantísimas, tantisísimas ganas de que nos toquemos a manos llenas, de recibir tus músculos, de sentir tus bombeos, de darte mi cariño y aprecio, de acariciarte la oreja, de morderte el pito, de darte un beso, de tu pecho, de tus pezones comer, de agarrar y lamer tu trasero, de tus cojones el roce, de darte mi alimento, de notar tu aliento, de jugar con tu boca, de reírnos sonriendo, de sentir nuestros gemidos, de juntar nuestras almas, de que me sientas por dentro, de explotar follando, de que nos corramos juntos… de saber que jodemos y es el vértigo la unión de nuestro cuerpos!!
Sin duda alguna para mí eres in situ la reencarnación del deseo. Puede que esté enfermo para algunos, que necesite ayuda según otros… No es así ni mucho menos, yo sé lo que quiero. Sé, Baco, que te deseo con toda mi alma. Tú fuiste mi ambición, mi mejor amigo durante toda mi inocencia. Lo sabíamos todo el uno del otro. Los dos somos piscis, “taoístas”, somos creativos, los dos estamos en la música y en el mismo curso además, yo con el saxo y tú con el piano. Nos gustan las mismas cosas en teoría; a lo mejor yo te gusto y eres como yo… Somos imaginativos, sensibles, amables, y no tenemos mucha fuerza física, no tenemos una gran resistencia física, los dos somos peces, quizás seamos la constelación reencarnada en el origen del símbolo, dos peces juntos, como nosotros debemos estar; odiamos la violencia. Baco, tú y yo, agua, el planeta Neptuno nos ampara. Somos alegres, emotivos, impresionables, soñadores, creativos, espirituales, místicos. Lo idealista nos une, sabemos escuchar y nos mostramos compasivos con el sufrimiento ajeno. Representamos la fusión del yo con el cosmos, con la eternidad, con nuestras almas gemelas. Es cierto que nuestra naturaleza es difícil pero porque somos extremadamente sensibles. No somos en la mayoría de los casos pragmáticos, y las decisiones nos cuestan, somos más neutrales. En general, «meamos muy alto». El humor lo tenemos a cien, aunque yo creo que el tuyo tiene mucho mérito porque es genial y sorprende always. Nuestro comportamiento a diario no se entiende pero es porque somos ilimitados.
Debes tener en cuenta Baco, que la vida afectiva es fundamental. Nuestro amor es sublime, caracteriza nuestra existencia. Tenemos que vivir juntos, en el profundo anhelo por lo absoluto y en mismísimo mistery. ¿Te apuntas?
Aquellos tiempos en que nos reíamos solos; competíamos porque realmente éramos los mejores. Me acuerdo que Isaac y yo, queríamos ser los dos tus mejores amigos, y al final gané yo; me acuerdo también cuando a los dos nos gustaba la misma chica, Alice, y al final decidiste que me la quedara yo, pero yo al que quería era a ti; me acuerdo cuando decía que me molaba tu prima para así acercarme más a ti; me acuerdo cuando nos reíamos del Alexis, el tonto el haba, jeje. Baco, te tengo en tantos recuerdos… como cuando te preguntaba las capitales de Europa y tú a mí los países. ¡Ay madre!, y cuando entramos en clase que mi tío nos abrió y le robamos fotos a la Alice, y se las rompimos y quemamos, que luego nos pillaron y nos castigaron, aunque a mí más. Qué me dices de aquellas tardes de verano en las que comíamos juntos en el comedor, jugabamos con los tazos, al “conejito de la suerte”… (no pudiere evitarlo) Baco eres mi sueño real, y que no te dé miedo, tú y solo tú eres mi rey, mi príncipe, la desdicha, tritono con ardor. Y si bien tenga que sufrir humillaciones, y de las más fuertes, estoy dispuesto porque sé profundamente que haría cualquier cosa por pasarla junto a ti, por estar para lo que necesites, porque te quiero y eso dice todo. Así, cuenta mucho dolor, mucha presión, mucho insomnio, a veces mucha hipersomnia, mucho lloro… Baco, ya tus fotos no surten efecto o tus recuerdos no apaciguan la marisma. Necesito tu piel; poros salvajes desatando con furia mis tenazas. No quiero estar amaniatado. Solo queda el deseo echo realidad para ser feliz. Quiero correrme en tus partes, quiero jugar con tu miembro viril. Los dos juntos, que me toques dándome achuchones hasta tu muerte. Tempus fugit.
Apuntaban que ser marica se nota, yo digo amor = sufrimiento, y yo no soy homosexual porque sí, a mí no me gustan los “machos cabríos”, de verdad lo digo, no, a mí me gusta Baco. Yo solo entiendo de sentimientos, y sé que no siento atracción por hombres ni hembras, que algunas me dan mucho asco, incluso más que algunos macizos. Yo solo amo y deseo a esa persona que es la que inunda mi espina de lágrimas, de recuerdos que sufro en silencio días, me doy cuenta de que la voz me engañaba, y de que lo que salía de mi boca estaba expuesto a lo que dijeron y lo que decían daba pie a mi nueva sílaba. Sin embargo, aquí, ante el papel, mi único aliado, me siento desde la noche a la mañana, aunque en parte me da igual lo que puedan leer, porque yo soy libre de escribir sobre mí lo que quiera. El rechazo social no me importa, porque yo soy el que rechaza la sociedad, no ellos a mí, sino yo por lo incompetentes y gilipollas que son. La sociedat está corrompida y cada uno/a ha de apexugar.
Much@s os preguntaréis qué se siente al ser libre como ahora. Puedo señalar que no existen normas, que todo es azar y no ese rollo del destino, las cartas y el tarot, solo existen causalidades y pequeña porción de casualidad, pero que normalmente derivan de algo –causa–. Como relataba, la libertad solo se puede sentir, no tener. Todo en la vida son condicionantes, hay condiciones que nos ponen y requisitos que debes cumplir. «Vencidos y vencedores». La sensación de sentirse libre muchas veces deriva de respirar hondo y aguantar. Dirás que estás obligado a respirar, y en parte es muy cierto, pero tú también la controlas, puedes retener, soltar, calmarla, acelerarla, discontinua… Puedes hacer muchas cosas con tu respiración, pero primero debes encontrarla. Baco, tú eres ese oxígeno que se transforma en dióxido de carbono y se va, pero vuelves otra vez a mi cuerpo, y otra vez más. “Tú me das la vida”. Necesito que los dos respiremos esa misma bocanada de aire fresco, que los dos nos demos vida, una simbiosis de amor, que conozcamos y aceptemos nuestros sentimientos, que sepamos lo que es amar. Laus Deo.
P.D.: La promesa de ser virgen no la he cumplido, tuve sexo con un pervertido cincuentón; peccata minuta. Fue horrible, las cosas que me hacía, era un adulador. Pero mi amor por ti va mucho más allá de eso. No puedo expresarlo, te quiero. Nuestra especie de embarazo: no podemos crear vida, ni jarto vino podemos quedarnos embarazados. Espero que la ciencia avance… Resquebrajado.